Prácticamente había descartado hacer esta última entrada (sí, última) porque ya iban tres, a cada cual más extensa para entender que el libro de la polémica, 75 consejos para sobrevivir en el colegio, está cargado de toxicidad. Si en la primera entrada están los extractos, en la segunda las contra-réplicas a Maria Frisa, la autora, y Alfaguara, la editorial y, en la tercera, desmenuzaba los aspectos más tóxicos, creía que ya era suficiente. Estaba por ir cerrando pestañas que tenía abiertas desde hace días pero al leer/escuchar las defensas que han hecho del libro, he acabado volviendo a coger el teclado para acabar, esta vez sí, con el tema.
7. Rebatiendo defensas al libro
Ganadora del último Cervantes chico, esta escritora empieza con en el argumento de que la literatura está llena de ejemplos de cosas "políticamente incorrectas" porque "ha sido transgresora desde sus orígenes" ¿Alguien ha discutido esto? No. Lo que pasa, pequeño matiz, es que en un libro dedicado a edades tan tempranas donde "la ironía" de ver que eso que cuenta Sara, la protagonista, es malo, no se percibe como tal. Al contrario, el libro fomenta que les vaya entrando en las cabezas jóvenes ideas muy negativas, de las peores de la sociedad, algo que al menos yo creía que intentábamos cambiar para llegar a un mundo un poquito mejor. Llamadme "políticamente correcta", ya ves tú que insulto.
Por suerte, en medo de la entrevista un hombre (no sé quién es) toma la palabra y os transcribo lo que dice, porque me parece muy acertado:
El bullying es un tema muy oculto sobre el que hay una especie de acuerdo y de silencio generalizado, es algo parecido al asunto de la violencia de género. Entonces, claro, ¿hasta qué punto, uno como escritor, o como cineasta que yo soy, a veces caemos en el inmenso error de culpar a los espectadores de errores que quizás son nuestros? ¿Hasta qué punto debemos culpar a los lectores de algo que simplemente se puede zanjar con una explicación? Pero no después, sino simplemente, a lo mejor, en el título del libro. Porque si me gustaría preguntarte, Ana, si tú crees que los niños a los que está destinada esta novela, entre 6 y 12 años, tienen herramientas suficientes para discernir si lo que leen es irónico o es real. (...) Yo tengo un niño de 8 y otro de 10 y es imposible que ellos puedan diferenciar, si no es con la ayuda mía o de su madre, lo que está escrito con ironía de lo que está escrito de manera real, literal y "seria". Entonces lo que es MUY cuestionable, por supuesto que ante todo está la libertad de expresión, pero lo que es muy cuestionable es que se ponga en manos de niños de 6, 8 o 10 años un libro que dice unas cosas para las que esas personas no están preparadas. Entonces ¿hasta qué punto...? Si por ejemplo el título del libro fuera "Manual para ser un anormal en el colegio" o "para ser un niño violento" o "para ser un acosador" pues a lo mejor lo entenderíamos. (...) es lógico hasta cierto punto que, haciendo uso de la misma libertad de expresión, esas 20.000 personas pidan la retirada del libro. Otra cosa es que se retire o que la editorial quiera afrontar incluso el sabotaje que está teniendo.
Después de este punto de vista (lamento, de nuevo, no poder daros un nombre), Ana vuelve a caer en que se ha tomado como manual y no como libro de ficción, algo que ya comenté en la segunda entrada.
Luego se va a comparaciones cogidas con pinzas: los cuentos de hadas. Porque claro, una niña que cruza un bosque y le habla un lobo, una princesa que cae en un profundo sueño por una manzana envenenada o por pincharse en una rueca y etc. es lo mismo que un relato de una niña que tiene la misma edad que quien está leyendo, que va al colegio, tiene deberes, amistades y nombres taaaaan extraños como Marina, Rebeca o Diego. Nada que ver con un nombre tan común como Blancanieves o Caperucita Roja. Yo tengo tres amigas que se llaman Blancanieves. A una la llamo Blanca, a otra Nieves y a la tercera Cani. Por no hablar que los cuentos clásicos transmitían alguna enseñanza como "desconfía de extraños" o "haz caso a los consejos de tus familiares". En cambio, el libro de marras enseña a ser machista, materialista, desobediente y pongo en cuarentena el tema de acoso por lo que os comenté de que al final ayuda a su ex ante unas burlas.
Lo siguiente es decir que Cenicienta, un cuento que se remonta al S. XVIII (o mucho antes si buscamos antecedentes en Egipto o la Grecia clásica) es machista. Dadle un pin a esta mujer, por favor. Claro que es un cuento machista, hasta la versión animada de Disney (1950) es de un machismo que tira para atrás (¿recordamos al ratón que no le dejan coser porque "eso es cosa de mujeres"?) ¿Esto tiene que disculpar que un libro publicado a principios del S. XXI lo siga siendo? Yo esperaba que siguiésemos avanzando, no retrocediendo.
Luego habla de las obras de Shakespeare ¿quién no las ha leído con 12 años o menos? Gracias a Diosa, viendo que se iba por los cerros de Úbeda le insisten en si los niños pueden discernir lo que pasa en EL LIBRO. Respuesta: "es complicado". Traducción: "como yo he venido a defender a mi compañera/editorial/profesión, no puedo decir que NO, a esa edad no distinguen, pero tampoco voy a mentir descaradamente diciendo que sí". Así que le echa el muerto a los padres para que lean "ciertos libros" con los chavales. Entonces, si "ciertos libros" que leen debe ir con supervisión para que los entiendan ¿podemos llegar al consenso de que no es apto para esa edad? Gracias.
Y acabamos con "esto me huele un poco a caza de brujas" y con comparaciones a la Inquisición. Dadme veneno que me quiero morir. Porque, claro, que la gente haga uso de su libertad de expresión (¡eh! ¡que nosotros, el populacho, también la tenemos!) para criticar un libro que es tóxico para niños es lo mismo que coger a mujeres y meterlas en la hoguera. Doble combo con tirabuzón para acabar esta parte.
Este artículo de opinión ya ha sido rebatido aquí por una profesora. Así que intentaré aportar algo más.
Los maravillosos libros de Manolito Gafotas se publicaron hace como dos décadas, se dice pronto. Yo también crecí con ellos y les guardo un gran cariño. Ya hablé de la comparación entre éstos y el libro de María Frisa (aquí) y me reafirmo en mi indignación con que se atreviese a establecer un nexo. Manolito tenía unos valores que aquí no se han visto ni en pintura. Lo que me ha sorprendido y hasta dolido es que la propia Elvira haya salido en defensa de este engendro. Llamadme malpensada pero que haya publicado buena parte de sus obras en la misma Alfaguara de María Frisa, algo debe significar.
Dice Elvira que lamenta que en EEUU se censurase el cuadro de Las Tres Gracias, que salía reproducido en un capítulo, y compara este puritanismo tan americano con los actuales "comités inquisidores" españoles. Volvemos a poner comparaciones que ni con pinzas se sostienen: censurar una obra de arte es una memez ¿qué tiene que ver eso con denunciar un libro en que se fomentan claramente actitudes machistas, materialistas y se defiende no actuar ante casos de acoso, incluso si van contra tu mejor amiga?
También dice Elvira que pedir la retirada del libro es un linchamiento. Dice que en sociedades abiertas los libros no se censuran ni se prohíben. Que los niños se deben acercar a todos los libros, que no muerden. Perfecto. Le voy a dar a leer una novela erótica de corte BDSM a la primera niña que me cruce por la calle ¿Y qué tal un libro histórico con fotos de los campos de concentración nazis llenos de cadáveres a un chavalín? Lo mismo tienen pesadillas de por vida pero ¡eh! ¡Que se pueden acercar a todos los libros! Por la misma regla de tres, quitemos las calificaciones a videojuegos y películas ¿no? Que niños pequeños jueguen a matarse en juegos con sangre muy realista, o que vean porno duro en pantalla HD.
Los libros, videojuegos, películas y todos los medios narrativos tienen rangos de edades por un motivo. Me parece absurdo que Elvira Lindo, por intentar defender un libro indefendible, caiga en un argumento tan tonto. Estamos hablando de que hay noticias cada poco tiempo que hablan de estudios o casos de adolescentes cada vez más jóvenes que sufren relaciones de malos tratos. Este libro que defiende "porque no se debe censurar ningún libro" dice que un novio celoso "alguna vez, es bueno".
Argumentos:
- Conozco a María Frisa (no especifica más)
- No me he leído el libro (pero critico a quienes lo critican que tampoco lo han leído pero al menos sí nos hemos tomado la molestia de saber qué más cosas dice aparte de las capturas iniciales)
Profundizaría más, pero entre eso y más excusas repetidas anteriormente... Vale, no, esto es nuevo. No se puede criticar el libro porque: "Al actuar en defensa de sus hijos, les están enseñando algo terrorífico: que puedes prohibir y eliminar todo aquello que te desagrade si gritas lo bastante alto e intimidas al responsable de tu disgusto. Les están enseñando modales de matón de patio de colegio". Hacer una petición en change.org es como dar una paliza al más débil del colegio. Porque, claro, el niño acosado de un colegio tiene personas de renombre que escriben en, otrora, periódicos de renombre que salen a defenderle.
Profundizaría más, pero entre eso y más excusas repetidas anteriormente... Vale, no, esto es nuevo. No se puede criticar el libro porque: "Al actuar en defensa de sus hijos, les están enseñando algo terrorífico: que puedes prohibir y eliminar todo aquello que te desagrade si gritas lo bastante alto e intimidas al responsable de tu disgusto. Les están enseñando modales de matón de patio de colegio". Hacer una petición en change.org es como dar una paliza al más débil del colegio. Porque, claro, el niño acosado de un colegio tiene personas de renombre que escriben en, otrora, periódicos de renombre que salen a defenderle.
No, los padres con niños que hayan salido a criticar el libro les habrán enseñado que tienen voz para usar su libertad de expresión, que ante algo que consideran injusto o pernicioso pueden y deben protestar (por supuesto, amenazar a la autora no es aceptable como forma de protesta). Por desgracia, también habrán aprendido que las luchas, rara vez consiguen sus objetivos porque el poder (aquí hablamos de una editorial de las grandes, si hubiese sido una pequeña otro gallo habría cantado), mientras tenga beneficios, le da todo bastante igual. Ni la imagen les importa tanto ya que, queramos o no, las redes son un espacio pequeño y en las televisiones, apenas ha salido nombrada la polémica. El escándalo pasa, Alfaguara seguirá ahí.
Un detalle antes de acabar: según el libro de María Frisa, lo que deberían haber hecho sus defensores es callarse y dejar que se buscase la vida ya que "Siempre, siempre tiene que haber alguien con quien meterese. Mejor que ese alguien no seas tú. Sí, es una pena que tenga que ser tu mejor amiga".
Me encanta el título del artículo: "75 consejos para linchar a una autora". Es el artículo que, para mí, resume a la perfección el conjunto de argumentos peregrinos que se han dado para defender el libro. Pero como hay algunas cositas diferentes quiero incluirlo para ir cerrando esto.
La primera "novedad" que no había visto anteriormente, el argumento cuñado estrella de corte liberal en cualquier debate de este tipo: "si no te gusta, no lo compres". Porque, claro, saber lo que se cuenta en un libro antes de comprarlo es lo más normal del mundo ¿Alguien puede decirle que no es una cuestión de gustos? Es una mera cuestión de adecuación del contenido del libro a una edad para la que no está indicada porque es MUY tóxico.
Otra cuñadez que sale a renglón seguido es (básicamente): "es ficción, eso no afecta". Curioso. En el libro de marras sale Crepúsculo (sí, en serio) y la misma Sara y su amiga dicen que juegan a ser Alice, debaten si está más bueno Jacob que Edward o critican que Rebeca se eche polvos de talco para tener un color de piel más "vampírico". Por cierto, no sé si será ignorancia de la autora, pero es una lectura juvenil, no infantil, que unas niñas de 12 no deberían haber leído. La ficción influye en nuestras vidas. Las historias enseñan, aportan sentimientos, ideas, reflexiones... Y más a edades que absorben como esponjas. A edades donde la identificación y las ganas de jugar a lo que se lee o se ve es inevitable. Recuerdo que leí un libro a esa edad sobre unas chicas que hacían una casa en un árbol y vivían allí de manera independiente. Luego estuve comprobando si existía esa posibilidad en algunos de los árboles de mi jardín y localicé un par de ramas en un gran pino que pintaban bien para dicho fin (no llegó a haber casa en el árbol, por si os quedáis con la intriga).
Luego, más comparaciones: Lazarillo de Tormes, obra que yo estudié en la ESO y sólo los pasajes más "graciosos"; Los Simpson, aparte de que no son libros, por muy dibujos animados que sea, no son aptos para menores de 12 años; Stevenson, supongo que pensando en La isla del tesoro, una historia de piratas con la que casi todo el mundo ha crecido sería censurable porque patata; La Biblia, porque puestos a ser cuñados... Nota: Hay ediciones de La Biblia ADAPTADAS a niños. Yo recuerdo haber tenido una con ilustraciones preciosas y me lo pasaba pipa leyendo esas historias (para mí eran eso, nada religioso en lo que creer XD)... No, en serio, ¿alguien le puede decir a toda esta gente que saca comparaciones de ahí abajo que los contextos históricos y/o fantásticos ya marcan un claro límite con la realidad que, sorpresa, no hay con el libro de María Frisa, protagonizado por una niña que va al colegio? Gracias.
Me quedo con el comentario de Berta a dicho artículo: "me pregunto si en lugar de una niña tonta y repelente que promueve el acoso y humillación a sus compañeros, fuera un niño blanco español que cree que hay que marginar a los negros y moros de su clase, habríais defendido el libro". Hay uno que le responde que sí "por ser ficción". Ya, seguro que por eso =)
Me quedo con el comentario de Berta a dicho artículo: "me pregunto si en lugar de una niña tonta y repelente que promueve el acoso y humillación a sus compañeros, fuera un niño blanco español que cree que hay que marginar a los negros y moros de su clase, habríais defendido el libro". Hay uno que le responde que sí "por ser ficción". Ya, seguro que por eso =)
8. Retirada ¿sí o no?
A estas alturas de la película, que se retire el libro o no me parece lo de menos. Y todo apunta a que editorial y autora se van a limitar al famoso sello que le van a pegar de "Es ficción" para ignorar todas las quejas que ha habido. O puede que al final ni lo pongan una vez pasada la polémica. Mi único consuelo es que el revuelo montado y todo lo que se ha escrito habrá puesto sobre aviso a posibles compradores de ahora en adelante. Y también espero que esto suponga revisiones algo más esforzadas en los textos que van para edades tan tempranas.
Me sorprende lo alegremente que han defendido este libro algunas personas, pues sus consejos "son ficción" y muchas otras excusas que se han puesto y que ya he comentado entre todas las entradas. No sé si seguirán publicándose pero yo recuerdo haber comprado decenas de revistas para chicas adolescentes (Super Pop y Bravo principalmente). Ahora las recuerdo y, salvando las distancias, pues eran para chicas algo más mayores, me doy cuenta que tienen el mismo tipo de consejos tóxicos sobre ene/amigas arpías o novios para los que vestirse bien.
No, que una niña lea este libro no tiene por qué hacerla una mujer alienada en el machismo, acosadora y miserable, pero está claro que no le ayudará a lo contrario. Primero este libro, luego entramos a una adolescencia con las mencionadas revistas y libros como Crepúsculo o After; seguimos avanzando y tenemos Cincuenta sombras de Grey. Y así. Hace falta tener la suerte de cruzarte con el feminismo, empezar a deconstruirte y eliminar de la cabeza toda la mierda que, desde muy pequeñas, te han metido. Sí, tan pequeñas o incluso más que Sara. Así que enhorabuena, María Frisa, por poner tu granito de arena en este sistema, por rebajar un poquito más todavía la edad de inicio en el patriarcado más feroz. Ojalá la inmensa mayoría de niñas que lo hayan leído se hayan quedado con lo de dibujar chibis. Visto lo visto, es lo único bueno que les ha podido aportar.
Si hubiera sido un libro enfocado a adultos (con el mismo contenido) habría servido más bien para concienciar a los adultos sobre el bulling. En cambio, es una guía para que un niño "sobreviva al colegio".
ResponderEliminarY por supuesto que los niños van a querer freplicar el comportamiento. O puede que logren discernir entre la ficción y lo que es la realidad, pero si un día se acuerdan y les ocurre usar uno de estos "consejos", con un resultado favorable para ellos, habrán conseguido un acosador más.
Me dan arcadas todo este tema. Si tan sólo dieran su brazo a torcer y lo catalogaran al menos como un libro satírico e informativo para padres... otro gallo cantaría :/
¡Un saludo!
Podían haber hecho muchas cosas que no han hecho y al final ha quedado todo en nada y seguirá estando esta mierda a mano de niños y niñas que tragarán toda esa basura como si realmente fuesen consejos y enseñanzas para "sobrevivir". En fin... asco de todo.
Eliminar*Aplauso*
ResponderEliminarSé que me pediste que reseñara el libro, pero no creo que pueda hacerlo mejor que tú, la verdad. Todo lo que dices es muy acertado. Y me horroriza el contenido del libro, a la par que me avergüenza la actitud de la autora. Tiene toda la pinta de que se niega a reconocer que se ha equivocado y pedir perdón, así que busca excusas pobres en lugar de asumir su responsabilidad. Como dicen en el otro comentario, igual se hubiera sido un libro en clave de humos para adultos habría sido una forma de denunciar el acoso escolar y el machismo, pero siendo para niños es HORRIBLE, así con mayúsculas. Cuando eres una cría no puedes diferenciar lo que es ironía de lo que no y te puedes tomar estas cosas perfectamente en serio, más porque coinciden con otros mensajes del estilo que nos mandan. No está parodiando la realidad, está fomentando una realidad muy tóxica porque lo de dice de verdad pasa, son comportamientos tóxicos que nos enseñan y los está reforzando.
Ejemplo real conmigo: a mí mi familia me hizo racista hasta que tuve la suerte de conocer el antirracismo, porque todo lo que decían de las otras etnias me lo creía. ¿Por qué no iba a hacerlo? Mi entorno lo decía y en los libros que leía los blancos siempre eran los buenos y si aparecían otras etnias eran malos o inferiores (ejem: Las crónicas de Narnia, Tintín, el jardín secreto, Peter Pan). Vale, no fueron sólo los libros los que me hicieron racista, pero yo me tomaba en serio las representaciones que hacía de otras etnias porque reforzaba el mensaje tóxico que ya me habían inculcado. Con este libro igual.
Cuando te diriges a un público, muchísimo más si es infantil, debes tener responsabilidad y saber bien lo que estás haciendo.
Gracias *reverencia*, muchas gracias *reverencia*.
EliminarEs que es eso que a ti te pasó con el racismo en concreto. El libro éste de mierda por sí sólo no convierte a sus lectores/as en machistas y/o acosadores pero es un eslabón más de la cadena. Y un eslabón importante porque concentra mucha basura en clave de humor (que hace que entre más fácilmente) en edades muy tempranas.
Me alegro que esto haya trascendido y haya gente que ha abierto los ojos, pero la cosa se ha quedado a medio camino =(