sábado, 30 de diciembre de 2023

Cuentos de los Hermanos Grimm (1)

Una última entrada para cerrar este año 2023. Me apetecía volver a hacer una reseña de cuentos clásicos y esta vez me he decantado por los famosos Hermanos Grimm, Jacob y Wilhelm. Supongo que ya lo sabréis pero éstos eran filólogos y folcloristas alemanes que hicieron un maravilloso trabajo de recopilar historias de la tradición oral para que no se perdiesen en el olvido, tarea que completaron en 1857. Eso sí, estas versiones suyas suelen tener elementos bastante más oscuros y macabros de lo que la mayoría de versiones que han trascendido, adaptadas a un público infantil, admitirían.

Cenicienta

Tras morir su querida madre, la que es su única hija cumple su último deseo de ser siempre buena y caritativa. Ni siquiera cuando su padre se vuelve a casar con una mujer con dos hijas preciosas de horrible corazón pone mala cara. Pero la joven se ve maltratada y reducida a una criada a la que llaman Cenicienta y sólo puede desahogarse yendo a llorar a la tumba de su madre cada día.

Este cuento es el primero de uno de los dos recopilatorios de los Hermanos Grimm de la colección Historias Maravillosas y se llevaba la portada que veis aquí al lado. No obstante, unos meses después, en otro volumen recopilatorio, en este caso de Charles Perrault, vi que también se incluye una versión del mismo. De momento voy a comentar ésta y ya haré una comparativa cuando lea la otra, siento curiosidad por ver las diferencias que habrá.

En esta versión de los Hermanos Grimm hay bastantes diferencias respecto a la historia que conocemos por la mítica película de Disney. Para empezar, me llama mucho la atención que el padre no muera durante la historia, por lo que es perfectamente consciente del maltrato que sufre su hija y no hace nada por ella en favor de las dos hijas de su nueva mujer. Hasta se refiere a ella por el despectivo nombre de Cenicienta y no por el que fuese suyo originalmente, que nunca se menciona. No deja de ser sorprendente que las pongan, justificadamente, de malas a la madrastra y a las hermanastras pero no haya ningún reproche velado a este hombre. Incluso en el mismo final del cuento, las hermanastras son castigadas brutalmente mientras que la madrastra y el padre se van de rositas.

Otra diferencia muy sorprendente es que no existe la figura del hada madrina, aunque hay dos elementos mágicos en el relato. Por un lado, la joven se puede comunicar con los pájaros que la ayudan en las peores tareas. Por otro, es un pajarito blanco en particular que está en el árbol que crece sobre la tumba de su madre el que le da los maravillosos vestidos con los que ir a las tres fiestas del palacio. Luego, al volver a casa, la joven los deja en la tumba y los pájaros lo recogen todo. Supongo que se puede interpretar que ese pájaro es su madre ayudándola, aunque queda totalmente abierto a interpretación. 

El cuento es muy breve, apenas 10 páginas en total y se le puede criticar por caer en repeticiones innecesarias. Por un lado, la madrastra le impone la misma tarea imposible a Cenicienta dos veces para evitar que vaya al baile y de ambas sale victoriosa de la misma forma. Luego, como he dicho, la fiesta en el palacio se extiende tres noches y el final es el mismo cada una salvo porque en la tercera Cenicienta pierde el famoso zapato de oro (no de cristal), algo que podría haber sido en la primera noche directamente. La historia del cuento es lo bastante fascinante como para haber usado ese espacio en otras escenas y evitar esta redundancia.

En definitiva, esta versión del cuento me ha parecido muy embrionaria, sin pulir, con elementos que no cuadran, otros comparativamente injustos y un potencial no explotado.

Hansel y Gretel

Hansel y Gretel son hijos de un leñador muy pobre. En una época de carestía en que ya no les quedaba ni pan para todos, la madrastra le sugiere al leñador que abandonen a los niños en mitad del bosque al día siguiente y, finalmente, éste accede. Sin embargo, los niños son más listos y esa primera vez logran volver a casa. Pero en la siguiente ocasión tendrán que enfrentar un gran peligro en mitad del bosque.

Otro de los cuentos más conocidos de estos autores y no es para menos con los elementos tan interesantes que tiene: hermanos listos y luchadores, que comparten y se ayudan, la fantasía de la casa hecha de dulces... Sólo me ha sobrado una escena tonta hacia el final en que los niños se comunican con un pato mágicamente, algo que pinta poco en el resto del relato.

De nuevo, vuelve a tocar la moral lo de madrastra mala y bruja aún más mala, pero el padre que accede a abandonar a los críos en el bosque, ya tal. De misoginia iban finos, está claro. Al menos se compensa un poco aquí porque Gretel, aunque la describan como una llorona cada poco rato, al final es la que acaba venciendo a la bruja.
 
La pastora de ocas

Una bella princesa es prometida al príncipe de un reino lejano. Al llegar el momento de irse al país de éste, la reina madre le entrega a la joven un pañuelo con tres gotas de su sangre, Falada, un caballo capaz de hablar, y una criada que la acompañe en el trayecto. Sin embargo, la criada acaba obligando a la joven princesa a intercambiarse sus respectivas posiciones. Cuando llegan al reino del príncipe, la auténtica princesa recibe la tarea de pastorear ocas.

Imagino que este cuento ya lo conoceréis menos gente pues, que yo sepa, no ha tenido adaptaciones destacadas. Al ponerme a leerlo lo he recordado pues salía en algún recopilatorio de cuentos que tenía de niña (y que debe estar en el fondo de alguna estantería). Recuerdo que siempre me dio mucha pena el destino del pobre caballo. Lo que ya no me acuerdo es si el final de esa versión ilustrada e infantil era tan bestia como la original que tiene el relato.

Del cuento no hay mucho que decir, es otra historia de joven buena y sacrificada, con algunos elementos fantásticos y una mala de turno. Visto así, comparte bastante con el cuento de Cenicienta. Hasta le puedo poner la misma pega de ser redundante en un par de escenas. Aun así, quizás sea porque lo tenía en el fondo de la memoria y la nostalgia ha hecho efecto, pero creo que tiene algo especial por lo que merece que le deis una oportunidad si nunca lo habéis leído.

lunes, 25 de diciembre de 2023

Colmillo Blanco, de Jack London

Quienes me sigáis por aquí desde hace tiempo ya os habréis dado cuenta que mis reseñas van por rachas. Una tanda de anime, otra de manga, otra de libros juveniles y así. Pues se ve que estoy en una de mis rachas de clásicos literarios (más o menos modernos) y es que van cuatro seguidas de historias que ya tienen sus añitos, aunque totalmente dispares entre sí.

También es cierto que me apetece ir tachando libros del listado de los 1001 libros y estaba segura que éste era uno de ellos. Pero no. Cuando lo terminé y fui al  documento con la lista vi que el único que sale del autor es La llamada de la selva. Menudo chasco más tonto.

Argumento

Las Tierras Vírgenes de Canadá eran un mundo salvaje, duro y cruel tanto para humanos como para animales. Comer o ser comido. Matar o morir. Así eran las cosas cuando la fiebre del oro atrajo a muchos buscando fortuna a finales del siglo XIX.

Esta historia comienza precisamente tras la muerte de un hombre en estas inclementes tierras. Dado que era un lord, pudieron pagar el traslado de su cadáver para ser repatriado a su hogar. El primer tramo del trayecto lo cubrían dos hombres que portaban el ataúd en el trineo tirado por seis perros. Estaba siendo un invierno muy duro y pocas criaturas se movían en el bosque. Cuando una manada de lobos hambrientos los empezó a seguir, dio comienzo una dura batalla de estrategia y resistencia.

De esa misma manada nació Colmillo Blanco, un lobo con un poco de sangre de perro corriendo por sus venas. Desde que salió por primera vez de la cueva que fue su hogar, tuvo que aprender las leyes duras que regían su mundo. Primero las de la naturaleza y, más adelante, las del ser humano. 

Reseña

Ha dado la casualidad de que hace justo diez años leí La llamada de la selva (o "de lo salvaje", según la edición, lo que realmente le pega más), la primera novela de este autor que me animaba a probar. Hoy vengo con lo que se podría considerar la otra cara de la moneda de esa misma historia pues las tramas de ambas son paralelas sólo que van en sentidos opuestos. Si en aquélla teníamos a Buck, un perro en el que se despertaban sus instintos heredados de generaciones anteriores de seres libres y salvajes, aquí el proceso es el contrario, con un lobo con muy poco de perro que se va adaptando a la vida con los humanos. 

Lo cierto es que me podría limitar a repetir lo que decía en la otra reseña porque son historia hermanas en el estilo y el tipo de circunstancias que viven los protagonistas de cuatro patas. No obstante, como realmente recuerdo muy poco de aquel libro, me voy centrar en hablar de éste sin hacer más comparaciones.

Colmillo Blanco se estructura en cinco partes de tres a seis capítulos. La primera parte, que es la más breve, es la que narra la aventura de los dos viajeros que trasladan el ataúd. Digamos que es un prólogo que se podría leer casi como relato corto independiente. La historia de Colmillo Blanco empieza realmente en la segunda parte, primero conociendo a los padres de éste, dos miembros de esa manada hambrienta, llegando a su nacimiento y, a partir de ahí, siguiéndole a él.

El autor hace mucho hincapié en la idea del entorno y las circunstancias como moldeadores del carácter de uno. Varias veces usa la metáfora de la arcilla a la que se le da forma, no sólo para Colmillo Blanco, sino también para algunos humanos. Esto, la capacidad de adaptación a los cambios y la idea darwinista de la supervivencia del más fuerte son las claves de toda la historia.

El libro tiene muchos momentos fuertes y duros, no adecuados para estómagos sensibles. Es ese tipo de realismo brutal y descarnado, casi como si viésemos un documental. Y luego pasamos de esa crueldad de la naturaleza a la crueldad humana, con algunos personajes realmente odiosos y escenas que te llenan de rabia. Por suerte, no todo va a ser maldad en la vida del peludo protagonista y también conocerá el amor y la ternura.

A pesar de la escasez de diálogos, el libro tiene un buen ritmo y no aburre en ningún momento ya que no se excede en descripciones farragosas como podría temerse. También le veo la virtud que no "humaniza" a los animales. No razonan como tal, pero nos muestra las cosas desde el punto de vista animal, resultando todo bastante realista.

Sí que hay que reconocer que peca de un racismo poco disimulado. Para Colmillo Blanco, los humanos somos "dioses": podemos usar palos y piedras, crear fuego y refugios. La cuestión es que establece que los blancos, que aparecen ya en la cuarta parte, son muy superiores a los indios. Esto se basa en las construcciones del poblado al que le llevan, edificios sólidos de troncos frente a los tipis indios. Esto queda establecido como un hecho sin más reflexión por parte del autor y, desde una perspectiva actual, la verdad es que chirría. Es lo que tiene que el libro fuese escrito en 1906.

En definitiva, si os veis con ánimo de enfrentar algunas escenas brutales, las dos novelas son muy recomendables. Duras, intensas, pero fascinantes. Relatos de aventuras con altas dosis de crudeza pero algún momento esperanzador que acaba logrando que superar los pasajes más feos merezca la pena. Un viaje de ida y otro de vuelta de lo salvaje a la civilización.

miércoles, 20 de diciembre de 2023

El asesinato de Roger Ackroyd, de Agatha Christie

Quizás no sean las fechas más adecuadas para este tipo de historias por eso de tener la Navidad a la vuelta de la esquina, pero me apetecía volver a leer algo de la gran Agatha Christie y aquí vengo a contaros qué tal me ha ido con ésta, la tercera obra suya que completo.

Por situaros, este libro lo escribió en 1926 siendo su sexta novela. La primera, de 1920, fue El misterioso caso de Styles, novela en la que además presentaba a su célebre detective Poirot. Si quería seguir el orden cronológico de apariciones del peculiar detective belga debería haber leído Asesinato en el campo de golf, de 1923, pero el título y el contexto de ese deporte no me llamaban. Además, este libro por el que finalmente me decanté tiene el honor de ser la única obra de la autora en la lista de los 1001 libros que leer antes de morir. Con la de grandes obras que tiene, que me parece insultante que no salga Diez negritos como mínimo, tenía curiosidad por ver qué tenía de especial para que entre toda su extensa bibliografía fuese el único incluido.

Argumento

El doctor James Sheppard es el médico del pequeño pueblecito de King's Abbot, donde vive con su hermana Caroline. Como médico, además de atender pacientes, debe encargarse de tareas más tristes como certificar defunciones. La más reciente es la de la señora Ferrars. Ésta se ha producido por la ingesta de un exceso de medicamentos que tomaba para dormir, ¿ha sido accidental o un suicidio? La imaginativa mente de Caroline opta por la segunda opción. Según ella, el remordimiento por haber matado a su brutal marido (el informe de su hermano fue que murió por gastritis por exceso de alcohol) la llevaba tiempo atormentando y finalmente ha dado el paso. Aunque no se lo reconozca, en su fuero interno, James le da cada vez más crédito a esa teoría. A fin de cuentas, los síntomas de envenenamiento y gastritis son tan parecidos que podría haber sido el caso.

Además de la propiedad de la señora Ferrars, la otra gran mansión de la zona es la de Roger Ackroyd. Éste se casó años atrás con una viuda con un hijo, pero la felicidad duró poco y ella murió como consecuencia del alcoholismo. Roger crió a Ralph Paton como a su propio hijo aunque el chico ha acabado no siendo un hombre todo lo recto que esperaba Roger. En todo caso, los chismorreos del pueblo apuntaban a que los destinos tan parecidos de ambos por nefastos matrimonios de final triste a consecuencia del alcohol acabaron acercando a Roger Ackroyd y la señora Ferrars, por lo que esperaban un futuro compromiso. 

Como es previsible, la noticia de la muerte de ella impactará en Roger Ackroyd enormemente. No se imagina que él mismo será asesinado muy poco después. El principal sospechoso será Ralph, pero no el único: Flora, su sobrina y prometida de Ralph; Raymond, su secretario; Parker, el mayordomo; el Mayor Héctor Blunt, cazador y amigo; la señorita Russell, ama de llaves; o Úrsula Bourne, una de las doncellas. Y no olvidar un desconocido con el que se cruzó el doctor al volver a su casa tras cenar en la mansión con todos los demás la noche del asesinato. 

El detective Poirot se había instalado recientemente en el pueblo acabando como vecino del doctor Sheppard y su hermana. Aunque afirmaba haberse retirado recientemente, no puede negarse a ayudar en un caso donde todos esconden algo.

Reseña

Leyendo el argumento y avanzando en la historia, una realmente se pregunta qué tiene de especial para que lo hubiesen metido en la lista de los 1001 libros frente a muchos otros de la autora. El caso, a priori, no tiene nada muy especial: un asesinato, varios sospechosos, detalles que no cuadran y secretos que guardan los personajes que nuestro Poirot va sacando a la luz. Mismamente, el caso de Styles, su primera obra, era bastante similar en sus elementos más básicos.

En aquella primera aparición de Poirot teníamos a su amigo Hastings que narraba a posteriori todo el caso. Aquí, este papel lo desempeña el doctor Sheppard, que se convierte en el "Watson" particular de "Sherlock", es decir, Poirot. La narración que leemos la redacta el doctor igualmente y, como a Hastings, el detective nos muestra pruebas y evidencias que no terminamos de encajar y que él se niega a decir en la mayoría de los casos qué teorías le generan hasta más adelante, lo que es un tanto frustrante.

A medida que avanza la trama, vamos descubriendo los secretos y mentiras de los personajes y todas las piezas encajan al final en que tenemos al o a la culpable. Hasta coincide con la otra obra en dejarnos un planito para situarnos en la mansión. Como novedad, también se incluye un dibujo de la escena del crimen.


Al margen de esto, cabe decir que la entrada en escena de Poirot en el libro es francamente divertida. Estoy pensando en las adaptaciones al cine más reciente y cómo se han cargado al personaje que no sólo es un genio, sino que tiene unos momentos excéntricos y un tanto cómicos que lo hacen fascinante por el contraste con su capacidad mental.

En definitiva, como veis, no hay nada que haga sobresalir este relato de su primer trabajo o de tantos otros. Y sin embargo... Algo hay. Sí. Algo muy grande. Algo que me voy a callar porque debéis leer este libro sin saber por qué es especial. Sólo puedo deciros que lo es y que apenas había terminado el libro que lo volví a leer desde el principio para apreciar la genialidad de la obra. Quizás no resulta tan rompedor a ojos actuales, que tanta ficción de este género se ha producido, pero sí si nos situamos a principios del S. XX. Para quitarse el sombrero con esta autora, sin duda.

domingo, 10 de diciembre de 2023

Adquisiciones de Noviembre de 2023

Penúltimo mes del año que terminó hace unos días y toca ver qué ha caído. Ya adelanto que nada muy destacable, sólo tres libros. 

Como dije, de la colección Historias Maravillosas ya no me quedan muchos que me interesen y este mes han caído dos de ellos. El tercer libro que ha venido a casa es uno de la otra colección que me interesa actualmente: Pequeños tesoros de la literatura. No obstante, con ésta estoy siendo más selectiva porque no tienen una edición tan bonita que salga a cuenta como la otra.


- La señora Dalloway en Bond Street, de Virginia Woolf. Libro que creía que la historia que da título ocupaba todas las páginas pero en realidad es un recopilatorio de historias cortas que incluye alguna que ya leí y no me convenció, como el relato Kew Gardens.
- La historia del Doctor Dolittle, de Hugh Lofting. De pequeña vi numerosas veces la película protagonizada por Eddie Murphy sin pensar que estuviese basada en un cuento infantil. Hace unos años salió una nueva versión, más fiel al original, protagonizada por Robert Downey Jr. y fue cuando ya supe del origen de la historia. Aun así, tampoco llegué a investigar y ha sido ahora, al adquirir el libro y detenerme a navegar un poco que he visto que en realidad es el primero de una serie bastante extensa. Ya veré si, cuando lea éste, la prosa del autor me motiva a buscar los siguientes.
- Fábulas de La Fontaine (II). Fue en Septiembre cuando cayó la primera parte y tenía un poco de miedo que se me pasase la fecha y se me quedase este libro colgado, pero no. De este volumen, viendo la lista de títulos, no me suena ninguna de las fábulas. 

Hasta aquí. Ya queda ver qué cae en Diciembre con las Navidades. ¿Ya habéis escrito la carta a Papá Noel y/o los Reyes Magos? Yo todavía no, así que voy muy tarde!!

martes, 5 de diciembre de 2023

Cuentos de Hans Christian Andersen (1)

La gran mayoría de los libros de la colección Historias Maravillosas son recopilatorios de cuentos, así que no tenía muy claro cómo podría enfocar su posible reseña. Creo que la mejor opción es la que inauguro con esta entrada, que es leer y reseñar unos pocos de cada autor. Había pensado incluso reseñar por cada recopilatorio, pero las entradas se harían demasiado extensas. Luego pensé que con unos cinco tendría una buena cifra. Sin embargo, sólo con lo que me he enrollado en el primer cuento... En definitiva, mejor no me como mucho la cabeza y hablaré de los que den una entrada de longitud normal.

Siendo la primera entrada dedicada a cuentos de Hans Christian Andersen me parece oportuno hablar un poquito del autor. De nacionalidad danesa, nació en 1805 y falleció en 1875. Su origen no era humilde, sino directamente pobre. De hecho, al parecer, al escribir el cuento La pequeña cerillera tenía en mente a su madre. Tuvo desde joven vocación artística, primero por la ópera, que no fue lo suyo, pero que le valió para hacer contactos que le pagaron unos estudios. Empezó a escribir poemas, luego crónicas de los viajes que empezó a hacer, alguna novela y libreto de ópera. Al parecer, los cuentos no eran sus creaciones literarias favoritas, pero fueron los que le han hecho perdurar en el tiempo. Como curiosidades, conoció a Charles Dickens y en uno de sus viajes pasó por España y, en concreto, por mi Málaga, donde en 2005 le hicieron una estatua.
 
La Sirenita

La Sirenita vive en un reino acuático con su padre, el rey del mar, su abuela paterna y sus cinco hermanas mayores, cada una nacida con un año de diferencia. Cuando una sirena cumple 15 años se le permite subir a mirar el mundo de la superficie. Así, cuando cada una de las hermanas va alcanzado la edad suficiente, salen del mar por unas horas. Después de años escuchando las maravillas que contaban sus hermanas o su abuela, al fin le llega el turno a la Sirenita. Allí ve un barco con un apuesto príncipe y se enamora perdidamente de él.

Uno de los cuentos más famosos del autor. La película animada de Disney era de mis favoritas de pequeña y creo que llegué a gastar el VHS de las veces que la vi (voy a usar en la reseña los nombres de la película para facilitarme la escritura, aunque en el relato original sus personajes no tengan). También había leído el cuento en lo que ahora veo como versiones resumidas e infantiles. Me faltaba la versión completa y bastante más oscura de Hans Christian Andersen. Si la entrada a la cueva de Úrsula ya daba repeluco en la película, en el cuento lo supera con detalles que no me extraña que omitiesen. También la forma en que se queda con la voz de Ariel es menos mágica y más "radical". Y hasta la transformación de la cola de sirena en piernas es más dura y la deja con unas secuelas no consideradas en la versión que conocemos. En resumen, sólo por estos detalles bien merece la pena acercarse al cuento original.

No obstante, lo que más me ha sorprendido es el toque espiritual de la historia. Ariel no sólo está fascinada por el mundo humano y se enamora del príncipe. Según le cuenta su abuela, los humanos tenemos alma inmortal mientras que las sirenas viven unos trescientos años pero al morir se vuelven espuma y ahí acaba su existencia. Ariel desea el destino humano y la forma de conseguirlo es con el amor de uno, así que otro motivo de gran trascendencia por el que se arriesga a volverse humana. No esperaba que el cuento tocase el tema de la muerte y el más allá.

La crítica feminista, con la que en este caso discrepo, se centra en que Ariel lo deja todo por amor, cuando ni en la película de Disney, que es la versión que más peso pone aquí, es tan así. Ariel, en todas las versiones, desde muy joven, ha sentido fascinación por el mundo humano. El enamorarse de Eric es sólo un factor más. A esto se añade la inevitable rebeldía adolescente y el deseo de independencia, explorar, conocer el mundo más allá de su mar. Si a esto le sumamos el anhelo de trascendencia de su alma, algo que sólo sale en la versión original del cuento, el tema romántico pierde aún más peso. Además, la joven muestra otro rasgo muy positivo que es la madurez para aceptar las consecuencias de sus actos.

En cuanto al desenlace, hay otra sorpresa. No es el final feliz en que Ariel se casa con Eric, eso ya lo sabía por las versiones resumidas del cuento en que ella muere al volverse espuma. Sin embargo, aunque sucede eso, no es un final tan amargo. Y no digo más para dejar algo que descubrir por vuestra cuenta.

En definitiva, la versión animada siempre estará en mi corazoncito por la nostalgia y porque es una preciosidad, pero el cuento, con todo lo que amplia a pesar de su breve extensión, ha sido una lectura muy interesante.

El traje nuevo del emperador

Hubo una vez, hace mucho tiempo, un emperador pomposo y presumido al que sólo le interesaba vestir bien y tener muchos trajes. Dos estafadores, sabiendo esto, se presentaron ante él diciendo que eran capaces de crear las telas más hermosas del mundo que, además, eran mágicas porque sólo las podían ver personas inteligentes y capaces en su trabajo. El emperador picó el anzuelo y les encargó un traje.

En este caso, el cuento es mucho más breve y no hay elementos desconocidos para cualquiera que ya hubiese leído la historia, lo que es un poco chasco. La gracia de leer las versiones originales es tener esos detalles que se han censurado o recortado, así que esta lectura no da ninguna sorpresa. 

Lo interesante de la historia está en el desenlace que, me imagino, no destriparé a nadie. Cuando un único niño grita en medio del desfile que el rey va desnudo, el castillo de naipes se desmorona por completo. Sí que debo decir que resulta un tanto abrupto el final de la historia. El emperador sigue con el desfile "más altivo que nunca" y su corte le sigue el juego en contraste con todo el pueblo que se burla de él. Había leído versiones en que, tras el escándalo, mandaba buscar a los estafadores que ya habían desaparecido con todo el oro y las sedas que habían pedido para hacer su gran obra. Estas escenas finales me parecen un cierre más redondo aunque, por otro lado, que la cosa quede dejando la imagen de las burlas del pueblo a su monarca tiene su punto también.

Sin duda, un cuento que incluso hoy en día sigue sirviendo de maravillosa analogía para criticar a quienes buscan imponer sus creencias absurdas, sus delirios, por encima del sentido común (hay mucho de esto últimamente...). O también, de fondo está el rechazo a la corrupción, al gasto de dinero público en caprichos de gobernantes. Y me estoy acordando de Camps, que tuvo un juicio precisamente por unos trajes. Unos dos siglos después, lo que cuenta de manera fantasiosa y mordaz sigue plenamente vigente.

El soldadito de plomo

Como regalo de cumpleaños para un niño se fundió una cuchara de plomo y con ella se hicieron 25 soldaditos, todos iguales, salvo el último, al que le faltó material para una de sus piernas. No se imagina la pequeña figura coja las aventuras tan sorprendentes que le esperan una vez le saquen de la caja por primera vez.

Cierro esta primera entrada dedicada a reseñar cuentos clásicos con esta historia tan corta pero tan intensa.

Aunque ya conocía la historia, me ha llamado la atención que coincida en algunas ideas con El cascanueces y es que hay varios elementos en común. Quizás Andersen leyó el relato de Ernst Theodor Amadeus Hoffmann, que lo escribió en 1816, y le inspiró para este cuento que publicó en 1838. A su vez, diría que ambas obras debieron influir para los creadores de Toy Story, porque todas estas historias narran aventuras de juguetes una vez los humanos nos vamos de la habitación al caer la noche.

En este caso tenemos un cuento sencillo para entretener. Una pequeña gran aventura, sin más. Quizás por esto, el final parece un poco fuera de lugar.

Lo había olvidado, pero al buscar algunos de los datos he visto que el cuento fue adaptado por Disney en Fantasía 2000. Os dejo aquí el enlace para que lo podáis ver.