Continuamos con los anime de Primavera, que a este paso parece que se van a juntar con los del Verano, y es que aún me quedan varias reseñas. Y con este calor. Qué pereza. Pero bueno, venga, yo puedo.
Hoy os traigo la última realización del estudio KyoAni, ése que siempre genera pasiones y odios, casi en la misma medida. La historia se basa en las novelas ligeras de Ayano Takeda y cuenta hasta la fecha con tres volúmenes.
Argumento
La banda de música del instituto Kitauji fue famosa en su época por ganar varios premios nacionales pero, lamentablemente, el profesor a cargo cambió y todo se fue a pique. Ahora, un nuevo profesor buscará que se pueda regresar a aquella época dorada, dando algo de disciplina a la banda. Aunque no será fácil y poco a poco se presentarán situaciones como rivalidades por ver quién se hace con un solo, o miembros que no pueden dedicarle mucho tiempo al club por estar preparándose para el acceso a la universidad.
Kumiko Oomae, una chica que había estado en la banda musical de su colegio, visita la del Kitauji como estudiante de primer año, indecisa entre seguir con lo mismo o buscar una nueva actividad. Hazuki y Sapphire, compañeras de clase de Kumiko, deciden apuntarse y ésta acaba siendo reclutada, en cierto modo, por seguir a sus nuevas amigas. Sin embargo, cuando Kumiko ve allí a Reina, una compañera de su antiguo colegio, recuerda el incidente que tuvo con ella durante una competición y comienza a dudar.
Kumiko Oomae, una chica que había estado en la banda musical de su colegio, visita la del Kitauji como estudiante de primer año, indecisa entre seguir con lo mismo o buscar una nueva actividad. Hazuki y Sapphire, compañeras de clase de Kumiko, deciden apuntarse y ésta acaba siendo reclutada, en cierto modo, por seguir a sus nuevas amigas. Sin embargo, cuando Kumiko ve allí a Reina, una compañera de su antiguo colegio, recuerda el incidente que tuvo con ella durante una competición y comienza a dudar.
Reseña
Aunque ahora ya quede algo lejos, empecé esta serie justo a la par que acababa la aclamada Shigatsu wa kimi no uso. No es un detalle menor, ambas series tratan el tema de la música y si tengo que quedarme con una de las dos, Hibike! gana por goleada. Esto, que será sacrilegio para más de una o dos personas, me obliga a empezar la reseña por una comparativa.
Hibike! es una serie con una protagonista clara y un enorme elenco de personajes secundarios en diferentes grados que, por momentos, convierte la historia en coral. Aquí prácticamente todo gira en torno a la música, la banda, lo que favorece esa variedad de pequeñas historias con los personajes. En Shigatsu, en cambio, la música es un mero motor, acaba siendo secundaria porque la trama se empeña en girar alrededor del melodrama de dos personajes. Para mí, cuando mejor funcionaba aquella era cuando los secundarios cobraban importancia y se vivía la tensión de los concursos.
Quizás el peor defecto de esta serie sea su comienzo, poco halagüeño. Me consta de gente que la abandonó y lo entiendo, aunque desde aquí, si alguien que dejó la serie me lee, le recomiendo que le dé una segunda oportunidad. El trío de amigas protagonistas es un poco flojo, pero Kumiko va evolucionando y hay secundarios muy grandes que merece la pena conocer.
Lo que más me gustó de la serie fueron los pequeños conflictos, los desacuerdos entre un grupo tan grande de gente, las frustraciones por no alcanzar el nivel deseado, el esfuerzo, el tesón de los ensayos hasta hacer sangrar por la nariz... En definitiva, lo humanos que resultaron los personajes gracias a todo esto. Y es que me encantaría detenerme en cada uno de esos pequeños momentos que hicieron grande a la serie, haciéndola realista. Mucho más realista que aquel melodrama hiperbólico y exagerado de Shigatsu, tan prefabricado para generar sentimientos a la fuerza.
Sin duda, hay tres estrellas en la serie: Reina, Asuka y el profesor Taki. La primera por su madurez y lo claro que tiene sus objetivos. La segunda es, simplemente, la mejor de la serie por su fuerza y por la energía que transmite a todo el mundo. En cuanto al profesor, deja la boca abierta cada vez que con su cara de buenazo y sin un mal gesto dice verdades como puños que hace que todo el mundo baje la cabeza. Diría que sólo por estos tres personajes la serie ya es un imprescindible. El resto pueden ser menos memorables, incluso puede haber personajes irritantes, pero precisamente por ello resultan cercanos y reales. Sinceramente, muy pocos me han caído mal e incluso en esos casos, los he comprendido y he tenido cierta empatía. La mayoría, en cualquier caso, resultan simpáticos y agradables.
Aunque casi toda la serie gira en torno a la música, también hay un pequeño hueco para el romance. Puede echar un poco para atrás que hayan jugado con el yuri entre Kumiko y Reina; igual que en Free! (Free! T2) hubo muchos momentos para fantasear con (en ese caso) varias parejas. Sin embargo, ambas tienen sus propios intereses románticos masculinos, siendo el de Kumiko el que se va cociendo a fuego lento de una manera bastante adorable. En cuanto al de Reina, apenas se menciona y creo que sólo se desarrollará más adelante en las novelas o en una T2, si deciden continuar con la adaptación.
De animación y música, un trabajo prácticamente perfecto, como nos tiene acostumbrado el estudio KyoAni. De nuevo, comparando con Shigatsu, en lo que a los aspectos técnicos se refiere, están a la par, ambos animes son maravillas visuales y acústicas. Con lo que me quedo de éste es con la representación visual y realista de la música, en la que una pieza que suena bien y está perfectamente ejecutada llega a quien la escucha sin necesidad de que aparezcan árboles en flor en el escenario o ilusiones nada creíbles. Pura música, esfuerzo, tesón, ensayos. Verdad y realidad.
En definitiva, una serie más que recomendable, aunque reconozco que el arranque es lento y lo bueno puede tardar en aparecer para quienes no tengan mucha paciencia. Salvo algunos momentos y gags tontorrones, sorprende la madurez con la que se abordan los pequeños dramas y conflictos. Muy recomendable. De lo mejor de esta pasada temporada de Primavera.
Quizás el peor defecto de esta serie sea su comienzo, poco halagüeño. Me consta de gente que la abandonó y lo entiendo, aunque desde aquí, si alguien que dejó la serie me lee, le recomiendo que le dé una segunda oportunidad. El trío de amigas protagonistas es un poco flojo, pero Kumiko va evolucionando y hay secundarios muy grandes que merece la pena conocer.
Lo que más me gustó de la serie fueron los pequeños conflictos, los desacuerdos entre un grupo tan grande de gente, las frustraciones por no alcanzar el nivel deseado, el esfuerzo, el tesón de los ensayos hasta hacer sangrar por la nariz... En definitiva, lo humanos que resultaron los personajes gracias a todo esto. Y es que me encantaría detenerme en cada uno de esos pequeños momentos que hicieron grande a la serie, haciéndola realista. Mucho más realista que aquel melodrama hiperbólico y exagerado de Shigatsu, tan prefabricado para generar sentimientos a la fuerza.
Sin duda, hay tres estrellas en la serie: Reina, Asuka y el profesor Taki. La primera por su madurez y lo claro que tiene sus objetivos. La segunda es, simplemente, la mejor de la serie por su fuerza y por la energía que transmite a todo el mundo. En cuanto al profesor, deja la boca abierta cada vez que con su cara de buenazo y sin un mal gesto dice verdades como puños que hace que todo el mundo baje la cabeza. Diría que sólo por estos tres personajes la serie ya es un imprescindible. El resto pueden ser menos memorables, incluso puede haber personajes irritantes, pero precisamente por ello resultan cercanos y reales. Sinceramente, muy pocos me han caído mal e incluso en esos casos, los he comprendido y he tenido cierta empatía. La mayoría, en cualquier caso, resultan simpáticos y agradables.
Aunque casi toda la serie gira en torno a la música, también hay un pequeño hueco para el romance. Puede echar un poco para atrás que hayan jugado con el yuri entre Kumiko y Reina; igual que en Free! (Free! T2) hubo muchos momentos para fantasear con (en ese caso) varias parejas. Sin embargo, ambas tienen sus propios intereses románticos masculinos, siendo el de Kumiko el que se va cociendo a fuego lento de una manera bastante adorable. En cuanto al de Reina, apenas se menciona y creo que sólo se desarrollará más adelante en las novelas o en una T2, si deciden continuar con la adaptación.
De animación y música, un trabajo prácticamente perfecto, como nos tiene acostumbrado el estudio KyoAni. De nuevo, comparando con Shigatsu, en lo que a los aspectos técnicos se refiere, están a la par, ambos animes son maravillas visuales y acústicas. Con lo que me quedo de éste es con la representación visual y realista de la música, en la que una pieza que suena bien y está perfectamente ejecutada llega a quien la escucha sin necesidad de que aparezcan árboles en flor en el escenario o ilusiones nada creíbles. Pura música, esfuerzo, tesón, ensayos. Verdad y realidad.
En definitiva, una serie más que recomendable, aunque reconozco que el arranque es lento y lo bueno puede tardar en aparecer para quienes no tengan mucha paciencia. Salvo algunos momentos y gags tontorrones, sorprende la madurez con la que se abordan los pequeños dramas y conflictos. Muy recomendable. De lo mejor de esta pasada temporada de Primavera.
Este anime no estaría el primero en mi lista, he visto otros en primavera que me gustaron más. No digo que no esté bien, y calidad le sobra, tanto visual como musical, pero a mí no consiguió engancharme del todo. Me pareció demasiado lento, y si continué viéndolo fue por un par de personajes. Aún así, si hacen una segunda temporada seguramente la veré, porque tampoco llegó a aburrirme.
ResponderEliminarUn beso
Qué pena, somos poca gente a la que le ha parecido una delicia. Sí que tiene un arranque lento que lastra un poco, pero me parece necesario para sentar bien las bases =/
EliminarComo dices, el arranque es algo lento, y luego de vez en cuando te meten con calzador ese pseudo-yuri raro de las protas... pero desde luego no es K-on y hay algo más que moe.
ResponderEliminarTratan bien la dificultad de compaginar la banda con los estudios o el resto de su vida, así como el coste por mejor y por conseguir un hueco en esta.
Y luego, claro, Asuka y Taki tienen un carisma espectacular.
Es bastante más que moe ;)
EliminarEn este caso discrepo, la dejé al episodio 3, por puro aburrimiento, y clichés de personajes por doquier. Ritmo MUY lento, encima. No sé, no era mi anime...
ResponderEliminarJo, pues mira que pensaba en ti cuando decía que los que la abandonasteis deberíais darle una segunda oportunidad =( Pero bueno, hay gustos para todo el mundo y entiendo que si algo no engancha, luego es muy difícil retomarlo...
Eliminara mi este anime me gusto mucho, con muy buena banda sonora, un dibujo precioso y una historia que va mejorando con cada capitulo que pasa
ResponderEliminarSí! Me alegro de no ser la única que lo piensa =D
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