Bye bye Fido

Hoy me he despedido de un compañero de fatigas que ha estado conmigo desde hace algo más de 4 años: mi coche, alias, Fido. Sé que es una tontería porque a cambio tengo un nuevo compañero (alias todavía sin definir) que os presentaré posiblemente mañana pero no puedo evitar que me haya dado pena a pesar de los malos ratos que me ha dado, el último este lunes mismo que se negó a arrancar para dar el que habría sido uno de sus últimos paseos a Málaga. La verdad es que ha cumplido su misión a pesar de los pesares. Me ha llevado y traído de clases casi a diario durante todo el tiempo que llevo en la carrera. Me ha servido de rincóncito seguro algunos días que se me olvidó coger las llaves de casa mientras mis padres llegaban. Me ha mantenido calentita y cómoda en los trayectos en días lluviosos. Me ha permitido moverme y me ha dado una libertad de desplazamientos que no tenía. Ha sido mi primer coche.

No nos ha quedado otro remedio. Hago demasiados kilómetros en la época de clases (40 ida + 40 vuelta = 80 KM díarios aprox.) y aunque de motor estaba bien hasta hacía poco, había que arreglar el sistema de refrigeración. A esto había que sumar la capa de pintura por estar muy descascarillada, los bollos que tenía y que nunca fueron culpa mía (llegaba cierto día y encontraba uno nuevo...), el cierre centralizado que no funcionaba, los problemas de encendido y arranque... Si hasta el elevaduras eléctrico se burlaba de mí ya que la ventanilla del copiloto, desde el botón que tenía en el lado del conductor, se negaba a bajar, aunque subir, sí subía... En definitiva, muchas cositas que sumándolas daban un resultado que hacía pensar que no merecía la pena arreglarlo, y menos cuando anunciaron el plan 2000E que fue "hay que aprovecharlo".

Si os preguntaís de donde saqué el alias para el coche viene del dibujante del muñeco del 7UP, que es mi bebida gaseosa preferida. Dicho dibujante se llama Fido Dido y, como al igual que las botellas de 7UP, el coche era verde oscuro, pues relación directa XDD.

Os dejo con algunas fotos de mi Fido:

Esta foto es de un amuleto que supongo tendría la imagen de alguna virgen en la parte blanca y que era del anterior propietario. Cuando me lo dieron ya se había borrado y a pesar de ser muy atea para estas cosas, no lo quité en principio y, aunque lo intenté más adelante, no hubo forma de despegarlo y ahí se quedó. No voy a decir que por haberlo tenido no me haya pasado nada, pero sí que es cierto que nunca he tenido ningún accidente y aunque sea solo por recuerdo le hice una foto.

Esta foto ya mola menos. Es del hueco donde originalmente estaba la radio y que un día, al volver de clases, había desaparecido. Ese día iba con prisas y no comprobé que se hubieran cerrado todas las puertas a pesar de que el cierre centralizado ya fallaba. En el fondo mejor porque sino, seguramente me habrían forzado la puerta y eso habría sido peor. La verdad es que me da hasta pena el ladrón, porque la radio era bastante mala y lo de los CDs no funcionaba... Desde entonces empecé a usar la PSP para ir con música, ya que a todo volumen y, si los cristales estaban subidos en la autovía, se escuchaba perfectamente.

Y por último el cuadro de mandos (se llama así ¿no?). Con algo más de 101000 kilómetros me he despedido de Fido y eso que cuando lo cogí tenía unos 55000.

Es curioso que me dé pena haberle dicho adiós cuando hubo días en los que lo habría tirado por un precipicio como el cuando se paró cuando estaba frenando para una rotonda, o la de veces que no quiso arrancar y tuve que llamar a una grua para que lo pudiera poner en marcha. Supongo que prevalece más lo bueno que lo malo.

Gracias por todo, Fido. Hasta siempre!!