¡Primera reseña de un videojuego! WOOOOO… XD No, a ver, no soy muy aficionada a éstos, es tan simple como que solo juego a los Final Fantasy y a los Kingdom Hearts. No me saquéis de ahí, que me pierdo (bueno, tengo algún Zelda, algún Mario y algo más por ahí, pero "no son lo mío"), así que mi opinión se reduce a algo muy personal, sin grandes consideraciones técnicas y pasando de puntillas por los temas que dejo a los expertos. Si eso os sirve, seguid leyendo, si queréis una valoración “profesional”, aquí no la encontraréis… ^^U
Como es la primera reseña de videojuego que hago no estoy segura de cómo la puedo enfocar, así que la separaré en los apartados más comunes y que me parecen más relevantes.
Historia.
Sencilla. El bien luchando contra el mal. Cosmos es la diosa de la armonía y lleva toda la eternidad peleando contra Caos, el dios del desorden. En algún punto de su batalla, se buscan 10 peones cada uno para el enfrentamiento definitivo: los diez protagonistas de Final Fantasy (I-X) y sus diez antagonistas. La balanza se acaba inclinando del lado de Caos, y Cosmos se debilita hasta quedar casi agotada, al borde de la desaparición. Con sus últimas fuerzas mantiene el orden del mundo para darles tiempo a sus guerreros para que den con sus respectivos cristales, será la última oportunidad que tengan para vencer. Éstos, que habían acabado desperdigados por diferentes partes del mundo, en grupos o solos, deben hacer frente a sus temores y dilemas interiores para poder dar con sus respectivos cristales.
Así, la primera parte del juego es hacer que cada personaje dé con su cristal, en historias independientes, pero que forman un todo común. Cada historia se compone de 5 niveles donde, al principio y al final de cada uno hay videos y conversaciones que desvelan a lo que realmente debe dar respuesta cada uno. Por poner un par de ejemplos, Cloud (FFVII) se pregunta por qué debe luchar, qué sentido tienen en realidad esas luchas y busca su motivo para seguir peleando. Tidus (FFX) tiene por meta echar cuentas con su padre, Jetch, que está del lado de Caos.
Hay historias mejores y otras peores, pero todas tienen algo que las hace interesante y diferentes entre sí. Esta parte permite conocer a los personajes, con su forma de luchar y sus características, pero sobre todo, el cómo son. ¿Preferido? Tidus, de cabeza *___*
Una vez consiguen todos sus cristales, toca el momento de reunirse con Cosmos y tras eso… ¡sorpresa! Para saberlo, a jugar. Solo decir que una vez pasado el modo historia, el juego no acaba ya que se desbloquean historias especiales (que aún no he probado ya que aparecen con muchas “estrellitas” de dificultad XD) y aparece una modalidad de juego llamada “Coliseo” donde se pueden conseguir muchos objetos. Esta modalidad se suma a la de Historia, Arcade y Combate rápido que ya tenía el juego.
Duración.
Larga, muy larga. La base es completar las historias de todos y sumar un total de 4 niveles más, que bien puede hacer un único personaje con el que se decida llegar al final, o bien, dejar que todos los personajes las hagan y, que la batalla final sea con el que uno se sienta más cómodo al manejarlo. Además, como el nivel va subiendo bastante, lo normal es tener que repetir alguna que otra vez los mundos para poder ganar experiencia y así, avanzar hasta la batalla final. Y claro, esto es solo lo básico. Al juego se le añaden una serie de logros que quien quiera llegar a tener al 100% requerirá muchas, muchas más horas de juego. Y si no son todos los logros, simplemente el conseguir todas las invocaciones supondría echar unas buenas horas más. Es decir, el juego puede requerir las horas que uno quiera dedicarle, y el mínimo considero que son bastantes.
Batallas.
Al empezar el juego hay un pequeño prólogo donde el protagonista del FFI muestra la forma de combatir que tiene numerosos puntos a tener en cuenta. Lo básico es que hay dos tipos de ataque: Ataques fatiga y Ataques PV. Los de fatiga hacen que aumente una cantidad que, al realizar el ataque PV, es el total de vida que se quita al enemigo.
Hasta ahí, bien. Luego se suman a la batalla, por ejemplo, las invocaciones, cada una con un efecto distinto: Ifrit sube la bravura un 150%, Rubí iguala tu bravura con la del rival… Y también hay que contar el estado EX que es, básicamente, el límite de los personajes. Al entrar en modo EX el personaje recupera un poco de PV con Revitalia, hace ataques más fuertes a base de críticos y, si acierta a dar un Ataque PV al enemigo, puede realizar una descarga EX que sería el límite en sí y donde, al cumplir un requisito (como pulsar una combinación de botones rápidamente, o pulsar botones en un orden) hace el ataque más poderoso.
Esto en un RPG no daría problemas, pero en un combate donde los escenarios son de lo más variopinto y, además de atacar, hay que moverse y evitar caer al vacío (la consecuencia es que se teletransporta al personaje a un sitio sólido de nuevo, pero le resta puntos de bravura), la cosa se complica. Por suerte, aquí servidora que es bastante inútil a la hora de tener que encargarse de tantas cosas (sí, lo reconozco), encontró su salvación cuando, al acabar el prólogo o la primera historia (ahora no recuerdo) se desbloqueó el combate por órdenes.
Básicamente consiste en que el personaje se mueve él solito y el jugador controla con un menú típico de los FF las órdenes que quiere meter: ataque bravura o PV, la invocación, cuándo entrar en modo EX… Hay momentos en los que uno se pregunta a qué está jugando el personaje, que va hacia donde le da la gana, pero en general se porta bien. Y luego, con Piedras Rosseta se puede desbloquear una habilidad en cada personaje que sirve para mejorar la IA y que éste se mueva mejor. Sin este modo, dudo que hubiese podido pasarme el juego, lo habría mandado a paseo XDDD
Gráficos.
Fantásticos. El video de presentación es una pasada, y el resto de animaciones están francamente bien… y hay bastantes escenas. Los personajes son muy ricos en detalles y tienen hasta aspectos alternativos para las batallas que se pueden “comprar”, uno de los que más destacaría sería el de Cloud: el básico es su traje de SOLDADO de FFVII mientras que el alternativo es su ropa de Advent Children.
Los escenarios son muy ricos también en detalles y dejan moverse por completo por ellos. La mayoría son los de las batallas finales de cada FF y cada uno tiene alguna particularidad. Además, en algunos (ahora no sé si en todos), se destruyen partes del escenario con la lucha, o sino, se llegan a ver las marcas que dejan los espadazos que acaben contra las paredes. De hecho, el romper parte del escenario puede ser recompensado con algún accesorio XD.
Conclusión.
Dejando aquí la reseña, que me he extendido demasiado, diré que es un juego con el que he pasado (y aún sigo pasando) muchas horas. Muy entretenido, con niveles de dificultad para todos los gustos y que me ha permitido conocer un poco a los personajes de los FF que aún no he jugado (I, II, IV, V y VI). La historia, aunque parte de ser sencilla, tiene varios giros de guión y sorpresas que le hace ganar puntos de manera global. Es lo que más valoro de los juegos de la saga FF y, pensando que este juego iba a ser solo peleas, me sorprendió que realmente tuviese una buena historia detrás, bebiendo más de la base de los RPG marca de la casa, que de juegos de peleas. No iba con muchas expectativas y el juego me ha encantado. Mi criterio como jugadora no es que valga demasiado, pero por si os sirve, aquí os dejo esta reseña =)
Como es la primera reseña de videojuego que hago no estoy segura de cómo la puedo enfocar, así que la separaré en los apartados más comunes y que me parecen más relevantes.
Historia.
Sencilla. El bien luchando contra el mal. Cosmos es la diosa de la armonía y lleva toda la eternidad peleando contra Caos, el dios del desorden. En algún punto de su batalla, se buscan 10 peones cada uno para el enfrentamiento definitivo: los diez protagonistas de Final Fantasy (I-X) y sus diez antagonistas. La balanza se acaba inclinando del lado de Caos, y Cosmos se debilita hasta quedar casi agotada, al borde de la desaparición. Con sus últimas fuerzas mantiene el orden del mundo para darles tiempo a sus guerreros para que den con sus respectivos cristales, será la última oportunidad que tengan para vencer. Éstos, que habían acabado desperdigados por diferentes partes del mundo, en grupos o solos, deben hacer frente a sus temores y dilemas interiores para poder dar con sus respectivos cristales.
Así, la primera parte del juego es hacer que cada personaje dé con su cristal, en historias independientes, pero que forman un todo común. Cada historia se compone de 5 niveles donde, al principio y al final de cada uno hay videos y conversaciones que desvelan a lo que realmente debe dar respuesta cada uno. Por poner un par de ejemplos, Cloud (FFVII) se pregunta por qué debe luchar, qué sentido tienen en realidad esas luchas y busca su motivo para seguir peleando. Tidus (FFX) tiene por meta echar cuentas con su padre, Jetch, que está del lado de Caos.
Hay historias mejores y otras peores, pero todas tienen algo que las hace interesante y diferentes entre sí. Esta parte permite conocer a los personajes, con su forma de luchar y sus características, pero sobre todo, el cómo son. ¿Preferido? Tidus, de cabeza *___*
Una vez consiguen todos sus cristales, toca el momento de reunirse con Cosmos y tras eso… ¡sorpresa! Para saberlo, a jugar. Solo decir que una vez pasado el modo historia, el juego no acaba ya que se desbloquean historias especiales (que aún no he probado ya que aparecen con muchas “estrellitas” de dificultad XD) y aparece una modalidad de juego llamada “Coliseo” donde se pueden conseguir muchos objetos. Esta modalidad se suma a la de Historia, Arcade y Combate rápido que ya tenía el juego.
Duración.
Larga, muy larga. La base es completar las historias de todos y sumar un total de 4 niveles más, que bien puede hacer un único personaje con el que se decida llegar al final, o bien, dejar que todos los personajes las hagan y, que la batalla final sea con el que uno se sienta más cómodo al manejarlo. Además, como el nivel va subiendo bastante, lo normal es tener que repetir alguna que otra vez los mundos para poder ganar experiencia y así, avanzar hasta la batalla final. Y claro, esto es solo lo básico. Al juego se le añaden una serie de logros que quien quiera llegar a tener al 100% requerirá muchas, muchas más horas de juego. Y si no son todos los logros, simplemente el conseguir todas las invocaciones supondría echar unas buenas horas más. Es decir, el juego puede requerir las horas que uno quiera dedicarle, y el mínimo considero que son bastantes.
Batallas.
Al empezar el juego hay un pequeño prólogo donde el protagonista del FFI muestra la forma de combatir que tiene numerosos puntos a tener en cuenta. Lo básico es que hay dos tipos de ataque: Ataques fatiga y Ataques PV. Los de fatiga hacen que aumente una cantidad que, al realizar el ataque PV, es el total de vida que se quita al enemigo.
Hasta ahí, bien. Luego se suman a la batalla, por ejemplo, las invocaciones, cada una con un efecto distinto: Ifrit sube la bravura un 150%, Rubí iguala tu bravura con la del rival… Y también hay que contar el estado EX que es, básicamente, el límite de los personajes. Al entrar en modo EX el personaje recupera un poco de PV con Revitalia, hace ataques más fuertes a base de críticos y, si acierta a dar un Ataque PV al enemigo, puede realizar una descarga EX que sería el límite en sí y donde, al cumplir un requisito (como pulsar una combinación de botones rápidamente, o pulsar botones en un orden) hace el ataque más poderoso.
Esto en un RPG no daría problemas, pero en un combate donde los escenarios son de lo más variopinto y, además de atacar, hay que moverse y evitar caer al vacío (la consecuencia es que se teletransporta al personaje a un sitio sólido de nuevo, pero le resta puntos de bravura), la cosa se complica. Por suerte, aquí servidora que es bastante inútil a la hora de tener que encargarse de tantas cosas (sí, lo reconozco), encontró su salvación cuando, al acabar el prólogo o la primera historia (ahora no recuerdo) se desbloqueó el combate por órdenes.
Básicamente consiste en que el personaje se mueve él solito y el jugador controla con un menú típico de los FF las órdenes que quiere meter: ataque bravura o PV, la invocación, cuándo entrar en modo EX… Hay momentos en los que uno se pregunta a qué está jugando el personaje, que va hacia donde le da la gana, pero en general se porta bien. Y luego, con Piedras Rosseta se puede desbloquear una habilidad en cada personaje que sirve para mejorar la IA y que éste se mueva mejor. Sin este modo, dudo que hubiese podido pasarme el juego, lo habría mandado a paseo XDDD
Gráficos.
Fantásticos. El video de presentación es una pasada, y el resto de animaciones están francamente bien… y hay bastantes escenas. Los personajes son muy ricos en detalles y tienen hasta aspectos alternativos para las batallas que se pueden “comprar”, uno de los que más destacaría sería el de Cloud: el básico es su traje de SOLDADO de FFVII mientras que el alternativo es su ropa de Advent Children.
Los escenarios son muy ricos también en detalles y dejan moverse por completo por ellos. La mayoría son los de las batallas finales de cada FF y cada uno tiene alguna particularidad. Además, en algunos (ahora no sé si en todos), se destruyen partes del escenario con la lucha, o sino, se llegan a ver las marcas que dejan los espadazos que acaben contra las paredes. De hecho, el romper parte del escenario puede ser recompensado con algún accesorio XD.
Conclusión.
Dejando aquí la reseña, que me he extendido demasiado, diré que es un juego con el que he pasado (y aún sigo pasando) muchas horas. Muy entretenido, con niveles de dificultad para todos los gustos y que me ha permitido conocer un poco a los personajes de los FF que aún no he jugado (I, II, IV, V y VI). La historia, aunque parte de ser sencilla, tiene varios giros de guión y sorpresas que le hace ganar puntos de manera global. Es lo que más valoro de los juegos de la saga FF y, pensando que este juego iba a ser solo peleas, me sorprendió que realmente tuviese una buena historia detrás, bebiendo más de la base de los RPG marca de la casa, que de juegos de peleas. No iba con muchas expectativas y el juego me ha encantado. Mi criterio como jugadora no es que valga demasiado, pero por si os sirve, aquí os dejo esta reseña =)