Con esto de haber pasado una racha de unos dos años en los que no he visto nada de anime (exceptuando un par de películas maravillosas como son La chica que saltaba a través del tiempo y Millenium actress), me he perdido bastantes series que merecían la pena y que no debía dejar pasar. Y aquí estoy, recuperando esta rama de la afición que tenía abandonada, como ya habréis notado por las reseñas que han ido cayendo.
Uno de esos anime es esta serie de 2011 y de título absurdamente extenso que viene a significar "Aún no conocemos el nombre de la flor que vimos aquel día" y que, para abreviar, todo el mundo la reconoce como Ano Hana.
Por cierto, al buscar imágenes he descubierto que este mismo verano ha salido una película que, al parecer, cuenta la misma historia desde el punto de vista de Menma, añadiendo algunas escenas, tanto de precuela como de secuela, a lo que se ve en la serie. Aún no la ha subtitulado nadie, y espero que cuando la vea, sea algo más interesante que el refrito de la película de Munto. Ya la reseñaré (o no... no os fiéis mucho de mí XD).
Uno de esos anime es esta serie de 2011 y de título absurdamente extenso que viene a significar "Aún no conocemos el nombre de la flor que vimos aquel día" y que, para abreviar, todo el mundo la reconoce como Ano Hana.
Por cierto, al buscar imágenes he descubierto que este mismo verano ha salido una película que, al parecer, cuenta la misma historia desde el punto de vista de Menma, añadiendo algunas escenas, tanto de precuela como de secuela, a lo que se ve en la serie. Aún no la ha subtitulado nadie, y espero que cuando la vea, sea algo más interesante que el refrito de la película de Munto. Ya la reseñaré (o no... no os fiéis mucho de mí XD).
Argumento
Un grupo de seis niños juega todos los días en el monte, en una base secreta que han construido, desde donde se plantean por objetivo defender la paz del mundo. El líder indiscutible es Jinta Yadomi “Jintan”, al que siguen Meiko Honma “Menma”, Naruko Anjou “Anaru”, Atsumu Matsuyuki “Yukiatsu”, Chiriko Tsurumi “Tsuruko” y Tetsudou Hisakawa “Poppo”.
Un día, todo se tuerce cuando Anaru le pregunta a Jintan, delante de todos los demás, si le gusta Menma. Éste lo niega, llamándola fea, pero ante la sonrisa avergonzada que no esconde su dolor, Jintan sale corriendo de la base. Es consciente de que le debe pedir perdón, aunque eso ya lo hará al día siguiente.
Pero al día siguiente, Menma muere en un accidente antes de reunirse con sus amigos.
Un día, todo se tuerce cuando Anaru le pregunta a Jintan, delante de todos los demás, si le gusta Menma. Éste lo niega, llamándola fea, pero ante la sonrisa avergonzada que no esconde su dolor, Jintan sale corriendo de la base. Es consciente de que le debe pedir perdón, aunque eso ya lo hará al día siguiente.
Pero al día siguiente, Menma muere en un accidente antes de reunirse con sus amigos.
Así pasan diez años. Todos han cambiado mucho y han perdido el contacto. Y, de repente, Menma se le aparece a Jintan y le pide que cumpla su deseo, a pesar de que ella misma no recuerda en qué consiste, salvo que siente que para ello deben estar todos los amigos juntos de nuevo.
Reseña
La cosa pinta bien sabiendo que detrás está el director de Toradora! (que me encantó) y Honey and Clover (que no me gustó, pero que reconozco sus virtudes en su versión anime). Ya sólo por el argumento parece evidente que no estamos ante una historia superficial o insustancial. Con apenas 11 capítulos, la serie llega y emociona. Es normal que lo haga, el tema que trata y las situaciones planteadas son bastante duras. A fin de cuentas, todo gira alrededor de los sentimientos de un grupo de amigos que se vieron afectados de niños por la muerte de uno de ellos, de una manera repentina e inesperada.
Con todo, no es una serie que se regodee en el sufrimiento, pues cuenta con bastantes escenas ligeras, con toques de humor y simpáticas. Sí, hay bastante drama, y los personajes lloran y confiesan lo que tenían guardado dentro desde hace mucho tiempo, pero esos momentos están llevados con gran maestría y quedan naturales, evitando el melodrama barato. Sin embargo debo decir que al final, en el último capítulo, se exceden bastante con la llorera general de todos, que al menos a mí me la contagiaron, sí, pero dado que en el resto de capítulos todo estaba muy bien llevado y controlado, aquí se les fue la mano.
La serie es, ante todo, un retrato humano de diferentes tipos de personas. Y las motivaciones que tenemos todos ante las decisiones que debemos tomar. Hablo principalmente del egoísmo, que resulta muy importante y se convierte en una losa de culpa que pesa sobre todos ellos por un motivo u otro.
Otro punto fuerte de la serie es la relación con los padres desde diferentes puntos, especialmente porque no se olvidan de la familia de Menma, y se nos muestra cómo están ellos también después de diez años.
Es una serie que aunque en su desarrollo sea o aparente ser bastante light, toca muchos temas delicados: la muerte, el paso del tiempo, los lazos que se rompen, el cambio que sufrimos las personas al crecer, la culpa, los remordimientos, los sentimientos que no son capaces de olvidarse, la relación con los padres... Muchas, muchas cosas.
Además, cada personaje, al crecer, afronta la muerte de Menma de una manera diferente. Por ejemplo, Jintan se ha convertido prácticamente en un "hikikomori" (un chico que no sale de casa), aunque esto no sea únicamente por la muerte de Menma. Con Anaru se toca el tema de la falta de identidad y los prejuicios hacia las "gals". Lo de Yukiatsu... tiene tela, es para mí lo más cogido con pinzas. Poppo es la sorpresa hacia el final de la serie. Su trauma no tiene el espacio que se merece para desarrollarse con coherencia y superarlo. Pensándolo bien, tampoco tiene mucho sentido el sentimiento de culpa que le embarga. Y Tsuruko es en la que menos se llega a profundizar salvo por la película que tiene montada en su cabeza y que tampoco tiene mucha lógica.
Así, ante una Anaru y un Yukiatsu a quienes se les trata a fondo, incluso resultando algo repetitivos sus sentimientos, quedan un Poppo y una Tsuruko a los que se les da un drama algo artificial por el mero hecho de que ellos también deben sufrir al mismo nivel que los otros. Y en cuanto a Jintan, es quien menos huella me ha dejado a pesar de ser el protagonista.
Aparte de todos ellos está Menma, un personaje adorable. Tanto por su diseño (que otro punto fuerte de la serie es lo diferenciados que son los personajes en estilos y caracteres) como por su personalidad de la niña alegre y dulce que fue y que mantiene aunque, extrañamente (más aún de lo que ya es de por sí la situación), se presenta ante Jintan como si tuviese la misma edad que el resto de personajes.
De todos modos, por más que me ha gustado la serie, debo ponerle un par de pegas adicionales. La primera es que tengo la sensación de que no se ha explotado el potencial que tenía todo lo posible, decayendo un poco al pasar los capítulos. Sólo un poco, pero algo sí que se nota. Y la segunda pega es que al final se quedan muchas preguntas sin responder en lo que a la aparición de Menma se refiere, así como un desenlace un tanto abierto. Esto se suma a la sensación de que Poppo y Tsuruko han quedado algo descolgados respecto a los otros personajes, por lo que tengo que quitarle algún punto en la nota.
En cuanto a animación, diseño de personajes y música, todo bien o muy bien. Tanto el opening como el ending son dos canciones muy simpáticas y pegadizas. Y en dibujo se mantiene de manera constante toda la serie sin que se vean altibajos o deformaciones. Un trabajo correcto y de calidad.
En conclusión, salvo por algunos aspectos, unos más relevantes que otros, Ano Hana es una serie altamente recomendable. Es emotiva a la par que simpática. Te hace reflexionar sobre muchos temas y al mismo tiempo presenta un polígono romántico clásico como elemento clave para las relaciones de los personajes. A pesar de sus fallos, por series como ésta me acuerdo de por qué me gustaba ver anime =)
Además, cada personaje, al crecer, afronta la muerte de Menma de una manera diferente. Por ejemplo, Jintan se ha convertido prácticamente en un "hikikomori" (un chico que no sale de casa), aunque esto no sea únicamente por la muerte de Menma. Con Anaru se toca el tema de la falta de identidad y los prejuicios hacia las "gals". Lo de Yukiatsu... tiene tela, es para mí lo más cogido con pinzas. Poppo es la sorpresa hacia el final de la serie. Su trauma no tiene el espacio que se merece para desarrollarse con coherencia y superarlo. Pensándolo bien, tampoco tiene mucho sentido el sentimiento de culpa que le embarga. Y Tsuruko es en la que menos se llega a profundizar salvo por la película que tiene montada en su cabeza y que tampoco tiene mucha lógica.
Así, ante una Anaru y un Yukiatsu a quienes se les trata a fondo, incluso resultando algo repetitivos sus sentimientos, quedan un Poppo y una Tsuruko a los que se les da un drama algo artificial por el mero hecho de que ellos también deben sufrir al mismo nivel que los otros. Y en cuanto a Jintan, es quien menos huella me ha dejado a pesar de ser el protagonista.
Aparte de todos ellos está Menma, un personaje adorable. Tanto por su diseño (que otro punto fuerte de la serie es lo diferenciados que son los personajes en estilos y caracteres) como por su personalidad de la niña alegre y dulce que fue y que mantiene aunque, extrañamente (más aún de lo que ya es de por sí la situación), se presenta ante Jintan como si tuviese la misma edad que el resto de personajes.
De todos modos, por más que me ha gustado la serie, debo ponerle un par de pegas adicionales. La primera es que tengo la sensación de que no se ha explotado el potencial que tenía todo lo posible, decayendo un poco al pasar los capítulos. Sólo un poco, pero algo sí que se nota. Y la segunda pega es que al final se quedan muchas preguntas sin responder en lo que a la aparición de Menma se refiere, así como un desenlace un tanto abierto. Esto se suma a la sensación de que Poppo y Tsuruko han quedado algo descolgados respecto a los otros personajes, por lo que tengo que quitarle algún punto en la nota.
En cuanto a animación, diseño de personajes y música, todo bien o muy bien. Tanto el opening como el ending son dos canciones muy simpáticas y pegadizas. Y en dibujo se mantiene de manera constante toda la serie sin que se vean altibajos o deformaciones. Un trabajo correcto y de calidad.
En conclusión, salvo por algunos aspectos, unos más relevantes que otros, Ano Hana es una serie altamente recomendable. Es emotiva a la par que simpática. Te hace reflexionar sobre muchos temas y al mismo tiempo presenta un polígono romántico clásico como elemento clave para las relaciones de los personajes. A pesar de sus fallos, por series como ésta me acuerdo de por qué me gustaba ver anime =)
Me la empecé a ver y la dejé a la mitad, que tiene delito siendo 11 miseros capítulos... Me gustaba, pero le faltaba algo, no sé, me rallé. Pero está todo el mundo que no caga con esta serie, así que algún día tendría que ponerme en serio y verla entera xDDD No sé, supongo que me echó para atrás toda esa depresión que envolvía al prota :/
ResponderEliminarTe entiendo, la serie puede pecar de exceso de drama, así que tampoco te fuerces, si no te gustó en su momento, tal vez sea mejor olvidarla. O tal vez ver directamente la película cuando esté disponible.
EliminarDe todos modos, aunque todo el mundo esté "que no caga" como dices tú (XD), la serie no es tan perfecta y tiene varias cosas que no terminan de convencer.
Me han recomendado este anime muchas veces diciéndome que era maravilloso y con el que seguro acabaría llorando y amando a la vez. Le tenía un montón de ganas y la verdad es que le sigo teniendo aunque creo que bajaré mis expectativas un poco :)
ResponderEliminarHaces bien. La series buena y bastante recomendable, pero no es la perfección que dicen muchos.
Eliminara mi este anime me encanto, es una gran historia con un gran final
ResponderEliminarA mí me parece uno de los mejores anime del último lustro, es imposible no llorar con el final y está muy bien hecho. Un pelín lento en ocasiones, pero obligado
ResponderEliminarA ver, es bueno... pero no taaaaaanto. Que lo cierto es que no he visto apenas anime estos últimos años, así que si sube tantos puestos es por lo malo que son los demás, que también es posible XDDD
EliminarMe la vi hace ya un tiempo porque me la recomendó un amigo, y la verdad es que me encantó. Supongo que también porque no tenia ninguna expectativa y no me esperaba nada del otro mundo.
ResponderEliminarSí que tal vez no es el anime perfecto pero sí que es un anime que yo me volvería a ver. Aunque también creo que ahora tengo la sensación de que me gustó más de lo que me gustaba cuando acabé de verlo (no sé si eso tiene mucho sentido, pero bueno xD).
Un beso!
Te he entendido, tranquila XD A mí me pasa un poco al revés, me gustó mucho cuando la vi, pero según pasan los días, el recuerdo se va enturbiando con las reflexiones sobre los personajes y la trama. Y no creo que la vuelva a ver (esto ya por el argumento tan triste que tiene). Al menos la serie, la película sí que quiero verla =)
EliminarAhora mismo no tengo mucho tiempo para ver practicamente nada y con el anime me ha pasado como a ti, desde Sword Art Online no veo absolutamente nada (y antes de ese ya llevaba una racha de sequía) pero cuando me paso por blogs y veo algún anime que me llama la atención me lo apunto. Viendo tu buena opinión, un argumento bueno y el hecho de que el director de Toradora! está detrás (también a mí me encantó) me lo apunto para echarle un vistazo en vacaciones!
ResponderEliminarTodo el mundo habla maravillas de SAO, nada, habrá que verla XD
EliminarNo es incongruente, cuando algo que no te mata, a lo que le ves fallos, todo el mundo parece alabarlo como la gran obra del siglo... enfada porque te preguntas si es que están cegatos y no ven lo que tú sí. Así que te entiendo XD.
ResponderEliminarLo de Yukiatsu... en serio...NO XDDD
A mi la serie me gustó a medias. Fue llevadera, algunas cosas se me hicieron pesadas, pero con el último capítulo y el "escondite" lloré como un cabrón xDDD
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